Se nos ha dicho y asegurado que existe una crisis financiera internacional, el fin y el fracaso de un sistema. Siendo el origen de todo  EE.UU. También nos decían desde el gobierno que no había crisis, que no pasaba nada, pero de la noche a la mañana miles de personas han perdido su trabajo. La realidad es que ya no solo  hay  una crisis, sino muchas crisis machacando nuestra nación.

Nosotros, las personas de bien, si que vivimos una crisis real mientras que otros muchos que tienen un trabajo bien pagado y de máxima responsabilidad, no acuden a su puesto  en el CONGRESO DE LOS DIPUTADOS. Políticos que se toman el día libre cuando se tiene que tratar de las crisis y  de lo que nos viene encima. Esto es una vergüenza  una falta de respeto, un desprecio chulesco y grotesco hacia cualquier ciudadano y más hacia aquellos que han perdido su trabajo.

Pero es que además, con todo lo estamos y vamos a padecer, todavía siguen los saqueos a las arcas públicas por un alto porcentaje de representantes políticos sin distinción alguna.   Llega a ser tan habitual la corrupción que este hecho se ha normalizado en nuestra sociedad.  Demencial ¿verdad?. A toda esta basura mi desprecio, iros a la puta mierda, parásitos.

Esta claro que no soy la persona más indicada o preparada para hablar de crisis,  porque ni soy economista, ni tengo los medios e información de que dispone el gobierno de turno y aquellos que  dirigen nuestra economía. Ahora bien, quiero resaltar desde aquí  el mal aprovechamiento de estos medios por parte de nuestros dirigentes y de lo poco que les ha servido el poseer este potencial, y para ello me remito a las consecuencias reales que se están viviendo en los hogares de toda España.

Conozco mujeres sin estudios, amas de casa y también autónomos, estoy hablando de personas responsables, que con escasos recursos y mucho conocimiento son capaces de llegar y pasar el mes.

Desde mis vivencias, desde la calle, desde el día a día, he llegado a la conclusión de que existe una parte de responsabilidad proporcional a cada ciudadano  y por ello debe ser asumida en la medida que a cada uno de nosotros nos toca.

Ciudadanos alegres de corazón, que arrastrados por una fiebre de consumismo por encima o al límite de sus posibilidades se han visto atrapados en una calle sin salida.

Empresarios de temporada que llegaron y se fueron de la noche a la mañana. Empresarios que no se han preparado, ni fortalecido sus estructuras para presentar batalla. Empresarios oportunistas que han liquidado total o parcialmente sus empresas.

Especuladores de la vivienda que sin compasión , ni miramientos, se han forrado a costa del trabajo de millones de españoles. Mientras tanto, conscientes  de lo que ocurría,  ningún mecanismo estatal, autonómico  o autoridades competentes  ponían freno.

Y que decir de la banca, los mimados de los gobiernos y los que siempre ganan.

Multinacionales expertas en el chantaje social,  que han sacado,  lo estan  y sacarán dinero a costa de todos.

Los  sindicatos, la gran decepción del siglo XXI. Aquellos que se han convertido en mendigos que viven subvencionados a costa del gobierno. ¿Donde esta su respuesta social?

Y por ultimo y como  principal responsable, nuestro gobierno. No de la crisis , sino de la intensidad o  del impacto de cómo se ha recibido la crisis en nuestra sociedad . Estos progresistas de moda sabiéndolo lo que nos venia encima, y si no lo sabían malo, muy malo, nos han fallado al no prepararnos para esta crisis. No fueron capaces de  tomar  medidas preventivas  que podrían por un lado, atenuar esa crisis emocional en la población y por otro minimizar las consecuencias de la crisis financiera  en la economía real.

CRITICA FALLERA. FALLAS 2013