El reclamo del buitre
La España de hoy esta enferma, sus sociedades se están pudriendo cada vez más, y la corrupción ha hecho de nuestra nación una presa fácil, que atrapada en su presente, carece de un futuro inexistente.
Tras sobrevolar la presa, el reclamo del buitre ha inducido a que vengan de muy lejos aves carroñeras, las cuales se suman a las de la propia tierra; y de todas ellas, las más fuertes se aseguran una buena tajada, dejando que los débiles se conformen con los desperdicios.
La corrupción se ha masificado y ha alcanzado a todos los puntos de la sociedad, hasta a los propios trabajadores, los pilares que sostienen con su esfuerzo diario la nación.
Hemos conseguido ser partícipes de una locura viva, en la que a pesar de existir una gran diferencia entre los trabajadores, la parte más numerosa, con los grupos destacados de la sociedad, se sigue entrando en el juego. Mientras que unos lo hacen por millones de pesetas, los otros, los más numerosos, se venden por varios miles de pesetas, con el agravante de seguir condenados a trabajar toda su vida, en un ambiente de de traiciones, conspiraciones y desengaños.
Estamos llegando a una situación social en la que cabe preguntarse, si realmente se merece nuestra sociedad una oportunidad de continuación para con su existencia.
¿Hacia donde mandamos a nuestros hijos? ¿Este es el mañana que vamos a dejarles? ¡¡No!!, esto no puede seguir así, nuestra responsabilidad es demasiado importante.
¡¡¡Despertad!!!
Días difíciles, envueltos en mantos de terciopelo, son los que atraviesa nuestro pueblo. Cuando en Europa se tiende hacia la unidad, nuestra nación se descompone. En estos momentos es necesaria la existencia de un equilibrio político, formado por dos grandes fuerzas de ideológicas de diferentes. Una de ellas con la dirección del estado y la otra formación, con mayoría dentro de una oposición cada vez más numerosa. Todo ello para poder frenar provisionalmente la potenciación de grupos radicales cada vez más fuertes y organizados.
Unos a cara descubierta proclaman abiertamente sus objetivo y otros bajo una máscara falsa y provista de fina diplomacia esperan el momento oportuno para realizar con toda seguridad sus verdaderas intenciones.
El separatismo, es uno de los medios más eficiente para provocar la autodestrucción de una nación. Y en definitiva, del propio pueblo.
La causa de esta enfermedad social, que se extiende lentamente, pero de forma progresiva, es la situación de malestar e inseguridad creada por los partidos políticos de carácter nacionalista. Las consecuencias que se derivan de este hecho, son la pérdida de confianza del ciudadano y de su apoyo, al poder comprobar en sus propias carnes, que los principales problemas sociales no son solucionados. No por falta de ideas prácticas o medidas eficaces, sino por la existencia de intereses privados, partidistas e internacionales.
Ellos, expertos comediantes, aprovechan magistralmente esa oportunidad brindada por la ineficacia de un gobierno débil. Su comedia tiene una visión de futuro limitada y su representación no va más lejos de sus deseadas fronteras. Pero saben que el solo éxito en su región les puede hacer famosos y asegurar un dominio teatral que les permita anunciar el ultimo acto de su obra macabra, la gran conspiración.
No lejos de una realidad ridícula e irónica, seremos testigos de primera fila de un intento de transformación histórica en nuestra nación, al presenciar la creación de nuevos estados satélites, influenciados y manipulados por fuerzas ajenas, en contra de nuestro interés nacional.
El intento de acabar con nuestra historia, tierras y gentes esta en marcha, solo el resurgimiento de un movimiento social por la defensa de España, podría acabar con todas las enfermedades y males que están consumiendo el corazón de nuestra nación.